jueves, 4 de diciembre de 2014

LA CLASE PASIVA OLVIDADA

Massa se comprometió en caso de llegar a ser Presidente a eliminar el Impuesto a las Ganancias a los trabajadores y a cargar sobre aquellos que realmente tienen la obligación de pagar, "no puede ser que se siga castigando al que trabaja, al que produce y se esfuerza”.
Muy loable la propuesta del candidato y estamos de acuerdo con ella, pero a esta
formulación, le preguntamos ¿seguirá castigando a los jubilados como lo hizo en la Anses?. Dificilmente se podrá olvidar su gestión negativa en dicho organismo.
Estas palabras, pronunciadas en medio de su campaña proselitista, vienen a cuento para que entremos a analizarlas detenidamente, toda vez que se ven reproducidas en todas las plataformas políticas, en los discursos de organizaciones sociales, en los sermones religiosos, con las mejores intenciones, a no dudar y que son compartidas por la sociedad.
Al expresar "no puede ser que siga castigando al que trabaja, al que produce y se esfuerza" se emite un juicio valedero que es recibido con total aprobación, pero conduce a un interrogante ¿y los que ya no trabajan e hicieron su esfuerzo para lograr un justo y merecido descanso, pueden seguir castigados? Nótese que en ningún momento se los nombra para defender sus derechos. Que

que conforman, en realidad, un descarte penoso aparentemente natural.
Ya lo hemos dicho en varias oportunidades El Gobierno toma ventaja de la situación indefensa de una clase pasiva, agobiada por los años y el maltrato a que se ve sometida, insultos y agravios de por medio, buitres y caranchos en boca de la Presidenta. Inexplicable el silencio cómplice de políticos, terratenientes, industriales, profesionales, instituciones y buena parte del periodismo.
La tercera edad existe y no es descartable. La ingratitud y el desprecio hacia los mayores no pueden tener cabida en una sociedad, cualquiera que sea su identidad política o su ideología.