martes, 16 de diciembre de 2014

LA DÉCADA DEL NARCOTRÁFICO (III)

La opinión periodística comienza a reaccionar positivamente sobre la intervención del gobierno en el narcotráfico. Los comentarios realizados en nuestro primer artículo se ven reforzados por el editorial de La Nación bastante contundente en sus apreciaciones. publicado el día 15 de diciembre. Reporto lo más significativo:
"En realidad, estamos ante una clara complicidad de las autoridades nacionales con el crimen, sin que se vislumbre ninguna corrección en el rumbo suicida de mantener la extrema porosidad de nuestras fronteras."
"El vicepresidente de la Cámara de Apelaciones de Tucumán, Ricardo San Juan, afirmó que "no es sólo que el narcotráfico avanza; es el Estado el que retrocede". El juez federal de Orán (Salta), Raúl Juan Reynoso, mostró cómo las fronteras del Norte de nuestro país se convirtieron en un colador y dijo que ya es habitual en Orán que un procedimiento antidroga involucre "unos 900 kilos", mientras que el profesor de Ciencia Política de la Universidad de San Andrés, Alberto Fohrig, afirmó que existe "una política deliberada de «no control» por parte del Estado.
Por su parte, el presidente de la Asociación del Personal de los Organismos de Control (APOC), Hugo Quintana, denunció la connivencia entre el narcotráfico, el poder político y las fuerzas de seguridad. "Si no hay más narcotráfico en la Argentina es porque no quieren".
En nuestro mencionado artículo informábamos que la AGN acusó al Gobierno de "falta de voluntad política" para atender los problemas de los organismos de control. Agregó que no sólo existe una " sospecha de inacción" del Gobierno sino también de "connivencia" con el crimen organizado. Esta aseveración es muy grave
desde el momento que han trascendido dudosas maniobras del Gobierno que en cierto modo alentaban la introducción de drogas, como la efedrina. 
Como el Gobierno no tiene defensa, apela al ataque. Las irregularidades señaladas por el titular de la AGN, Leandro Despouy, fueron repelidas por la Pridente que lo interrumpió en un discurso en forma grosera y más tarde recibió una denuncia penal por el nombramiento de dos empleados que trabajan en el organismo que, presuntamente, no cumplen con sus funciones. Uno de ellos es discapacitado.
Estos desplantes descontrolados denuncian que si no hay complicidad, al menos hay un descontrol irresponsable del gobierno, que no tiene argumentos para contrarrestar las acusaciones.
“En Argentina hay seis carteles narcos ya instalados. Todo el Este, con los puertos de Rosario, San Lorenzo o Ramallo está controlado por los colombianos; los mexicanos dominan el norte de Buenos Aires y son netos exportadores de cocaína a Europa; los bolivianos transportan desde el norte, controlan en Salta y operan desde el barrio de Liniers; los peruanos hacen lo mismo desde Jujuy hasta el bajo Flores; los dominicanos mezclan el menudeo con la prostitución y los garitos clandestinos con epicentro en Constitución; los argentinos pueden ser mediadores en todos estos negocios y hay una banda importante que se maneja desde Villa Soldati”, explicaba Claudio Izaguirre de la Asociación Argentina Antidrogas.
Los informes facilitados por Izaguirre también dejan muy en claro que el punto más preocupante es el norte de la provincia de Salta, en donde ya se encuentran instalados carteles de Colombia y de México. “Manejan financieras, emprendimientos agrícolas y lo más preocupantes, tienen relación con miembros del gobierno, tanto de las orbitas municipales, como provinciales”
Gabriel Taboada narcotraficante del Cartel de Medellín que declaró contra el general Noriega, testigo clave de la DEA y que fuera asesinado los ùltimos días en Bogotá por una sicaria,, declaró en uno de sus artículos que, “en materia de narcotráfico, la ruta Santa Cruz de la Sierra-Resistencia pasando por Tucumán, Salta y Santiago del Estero, es una de las más usadas para el ingreso de droga a la Argentina, destinada no sólo a abastecer el mercado interno del NOA – NEA sino también a Europa. En este contexto, el ambicioso convenio para construir 2.500 viviendas suscripto entre el gobernador Jorge Capitanich y la Fundación de las Madres de Plaza de Mayo podría haber sido entonces la pantalla adecuada para una operación internacional de narcotráfico. Para empezar, pese a los 77 viajes del Cessna, sólo se habrían efectivamente construido en el Chaco unas 250 viviendas de Sueños Compartidos”
No se olvide que acá, sólo en la zona de Orán, residen unos 4.000 colombianos y algunos cientos de mexicanos que se dedican a controlar los envíos”, explica un ex agente de la DEA, la agencia antinarcóticos estadounidense, que trabajó haciendo inteligencia en el norte argentino hasta que el gobierno nacional decidió no continuar con los acuerdos de cooperación, según señalaba una investigación del 
diario Clarín.
Es posible que hayan informaciones exageradas y tendenciosas, pero también se han expuesto duras reclamaciones de funcionarios y jueces sobre las que no cabe la menor duda de su sana intención e imparcialidad. Se traen estos antecedentes a colación para que se entienda la grave situación que atraviesan nuestras fronteras por el auge descontrolado del narcotráfico que no merece la menor respuesta por parte de las autoridades competentes y mucho menos del Poder Ejecutivo Nacional