jueves, 19 de noviembre de 2015

EXTRAÑAS COINCIDENCIAS



El atentado terrorista en París del día viernes 13 al que nos referimos extensamente en el artículo del 16 de este mes, en el artículo “Un toque de atención” (V) llama nuevamente nuestra atención por ciertas  coincidencias muy llamativas.

La polémica novela “Sumisión” del famoso escritor francés  Michel Houellebeck  llegó a las librerías francesas el mismo día del trágico atentado en París contra Charlie Hebdo, semanario satírico francés, el 7 de enero 2015.
Se trata de una novela ficción sobre Francia en un futuro próximo. En 2022  Mohammed ben Abbes del recién formado partido musulmán gana las elecciones presidenciales a la candidata del Frente Nacional, derechista, y es el nuevo presidente de Francia.
François, un profesor universitario hastiado de la docencia y de su vida sexual, que a sus cuarenta años se había resignado a una vida aburrida pero sosegada, ve cómo la rápida transformación que sucede a la llegada del nuevo presidente al Elíseo altera la vida cotidiana de los franceses y le depara a él un inesperado futuro.  Los judíos han emigrado a Israel, en las calles las mujeres han cambiado las faldas por conjuntos de blusas largas y pantalones, y algunos comercios han cerrado sus puertas o reorientado el negocio. Y la Sorbona es ahora una universidad islámica en la que los profesores conversos gozan de excelentes salarios y tienen derecho a la poligamia. Pronunciará entonces las palabras que le abrirán las puertas de la religión islámica y de una nueva vida: «No hay más dios que Alá y Mahoma es su profeta."

Acusado de islamofobia o de dar alas a la extrema derecha, afirmó: «No tomo partido, no defiendo ningún régimen. Deniego toda responsabilidad. He acelerado la historia, pero no puedo decir que sea una provocación, porque no digo cosas que considere falsas sólo para poner nerviosos a los demás.»
Como su novela política fue considerada provocativa por los musulmanes, se le brindó protección y fue acompañado desde ese momento por dos agentes  policiales.
Lo que en su momento la crítica  opinó sobre ella  «Divertida, impertinente y desesperada. Sumisión esconde una inaudita lección. Menos escandalosa de lo que se ha dicho y más sutil de lo que parece» (Sébastien Lapaque, Le Figaro), resultó finalmente un inesperado pronóstico muy cercano a la realidad que se está viviendo en París.

Cuando se lo consultara a Houellebeck sobre este último atentado, cargó con violencia contra el presidente François Hollande y el resto de la clase política. Criticó duramente la actuación de los sucesivos Gobiernos franceses. “¿Quién ha anunciado recortes de los efectivos de policía y los ha exasperado al no poder cumplir sus funciones? ¿Quién ha explicado durante años que nuestras antiguas fronteras ya no tenían sentido, que eran un símbolo nauseabundo del nacionalismo de antaño?”, se pregunta Houellebecq. “Los Gobiernos de los últimos diez años (¿veinte? ¿treinta?) han fracasado penosa, sistemática y fuertemente en su misión fundamental. Es decir, proteger a la población francesa confiada a su responsabilidad”.

La coincidencia nos trae otra  similar circunstancia, en relación a la novela y se trata de la invasión cultural  musulmana  respecto a las universidades.
De hecho, la Sorbona, y no sólo en la novela, está subvencionada por Arabia Saudita. Un caso en el que la ficción precede a la realidad.
Hace unos días, el presidente de la Sorbona, Philippe Boutry, firmó un acuerdo con el fiscal general del estado de Qatar. En los próximos tres años, la monarquía islámica financiará los estudios de cientos de inmigrantes sirios en la joya académica parisina. La Sorbona ha aceptado 600.000 euros por año durante tres años.
 La gloriosa academia francesa se está convirtiendo en un campo de refugiados islámico.
En el Reino Unido, el Islam también está comprando la academia británica. Ocho universidades, como Oxford y Cambridge, han aceptado más de 233,5 millones de libras esterlinas de fuentes saudíes y musulmanas desde 1995. La suma total asciende a la mayor fuente de financiación externa para las universidades del Reino Unido.
En EE.UU., es lo mismo. 20 millones de dólares fueron donados al Centro de Estudios de Oriente Medio en la Universidad de Arkansas; 5 millones de dólares para el Centro de Estudios de Oriente Medio en Berkeley, en California; 11 millones a la Universidad de Cornell en Ithaca, Nueva York y medio millones de dólares a la Universidad de Texas (la séptima universidad, en orden de tamaño, en los Estados Unidos); 1 millón a Princeton; 5 millones de dólares a la Universidad de Rutgers.

Es significativa la posición política de Houellebeck que dispara contra sus actuales gobernantes, contra lo que considera el silencio de los hombres, contra las clases dirigentes y la pérdida de libertades. En su libro retrata a Francia al borde de una guerra. Tiene opiniones similares a las de Marine Le Pen, presidenta del partido derechista Frente Nacional y por eso lo acusan de islamófobo.
Responde a esas acusaciones diciendo "Me da igual, no creo que nadie vaya a cambiar de ideología por leer un libro”.
Cuando el periodista le pregunta cómo saldrá Francia de esta grave situación, responde: “Francia resistirá. Los franceses sabrán resistir, incluso sin ostentar un heroísmo excepcional, sin necesidad de un impulso colectivo de orgullo nacional. Resistirán porque no se puede hacer nada más, porque uno se acostumbra a todo”. “Ninguna emoción humana, ni siquiera el miedo, es tan fuerte como la costumbre. Keep calm and carry on. Mantén la calma y sigue adelante. De acuerdo, así lo haremos, incluso si no tenemos, por desgracia, un Churchill al mando del país”.