viernes, 6 de noviembre de 2015

ALERTA ROJO


La presidente está evidenciando una disminución apreciable de sus facultades mentales a la que asistimos con total indiferencia.  Sus últimas decisiones  tomadas en raptos de indudable inestabilidad están poniendo en grave peligro las instituciones del país.
El hecho de que a sólo  un mes del término de su mandato despache un aluvión de decretos de nombramientos , cree nuevos organismos y oficinas estatales, proponga la designación de dos jueces para integrar la Corte Suprema de Justicia, ordene telefónicamente al Congreso Nacional  el nombramiento y posterior juramento de dos miembros en la Auditoría General de la Nación, inaugure públicamente por medio de la cadena nacional obras ficticias y prefabicadas  al efecto, la última de las cuales fue la de un hospital que hasta la fecha no abrió sus puertas, son signos inequívocos de una fuerte alteración mental.
Acaba de publicarse un libro del médico y periodista Nelson Castro sobre este tema y aunque de acuerdo a las críticas que he leído sobre el mismo, el autor no expresa opiniones personales acerca de las consecuencias de su dolencia, resulta oportuno exigir  a los políticos, legisladores y abogados, se hagan cargo de esta responsabilidad y actúen en consecuencia.
El 30 de octubre de 2013 dirigí cartas a los principales diarios, cuyo texto transcribo más abajo, que fueron ignoradas, a pesar de la trascendencia del problema en el orden institucional del país.
Si permanecemos en una continua indiferencia, a cuyas consecuencias  me refiero en el artículo "Vencimos la indiferencia” publicado en mi blog  el 3 de este mes, estaremos ignorando la trágica posibilidad de que  en el lapso faltante de un mes, un solo decreto autoritario del Poder Ejecutivo, por obra de su Presidente,  provoque daños irreparables a la estabilidad del país.
Es necesario comprender que esta advertencia no supone, ni remotamente, sugerir un golpe de estado, tampoco está motivada por razone políticas, ni busca originar  una inestabilidad del gobierno. Por el contrario, está destinada a evitar malos mayores provocados por una acentuada inestabilidad mental de peligrosas consecuencias.
Carta enviada:
Aptitud fisiológica del presidente
silviopedro pizarro <silviopedropizarro@gmail.com> 30 de octubre de 2013 17:32
Señor Director:
Por razones de ética profesional un médico debe recetar y aconsejar a su paciente. De acuerdo a la índole de su enfermedad, puede recomendarle imperativamente un descanso, disminución de
actividades y evitar el stress.
Eso es lo que el cuerpo médico que atiende a nuestra Presidente está realizando, con la mayor responsabilidad e idoneidad .Cumplir con sus precisas indiaciones es mandatorio para la salud del enfermo.
Una vez dada el alta definitiva, puede y debe reasumir sus funciones. Pero en un cargo de esta
naturaleza, ¿es legalmente admisiblel imitar sus actividades que, de por sí, son extremadamente exigentes?.  Un presidente no puede evitar el enfrentamiento con graves problemas institucionales que hacen a la supervivencia del pais, a la esencia misma de su desarrollo. No puede "visitar" su despacho dos o tres días por semana para la firma de expedientes. No puede evitar viajes aéreos que son necesarios para la política internacional del país.
Definitivamente, no puede seguir figurando en un cargo que en realidad no ejerce.
La Constitución Nacional, sabia como siempre, tiene la solución en sus artículos para este gravísimo problema institucional.
Silvio Pizarro