jueves, 22 de noviembre de 2018

¿Y LA AUDITORÍA A ANSES?

El 17 de septiembre se lanzó en Buenos Aires el Primer Simposio de Auditoría Gubernamental . La apertura estuvo a cargo de la Vicepresidente Gabriela Michetti y el síndico general de la Nación, Alberto Gowland.
Invitados fueron el exdirector de la Agencia de Auditoría Interna del Reino Unido, John Whitfield, el Gerente de la División de Integridad en el sector público de la OCDE, Gavin Ugale. El extitular de la Auditoría, Leandro Despouy y el actual auditor Jesús Rodríguez, el Ministro del Tribunal de Cuentas de Brasil TCU, Joao Augusto Ribeiro Nardes, Giovanni Falcetta del Instituto Brasileño de Gobernanza Corporativa y Edna Jaime de México.
La actual Sigen destacó el fracaso del anterior sistema de control y que ha asumido la responsabilidad de lograr una fiscalización acabada de las cuentas públicas, procurando consolidar en la totalidad del universo de organismos estatales los valores mencionados como pilares del control.(ya sabemos que en ese universo no figura Anses)
Señaló la concepción de que en materia de transparencia no debe haber concesiones (hay concesiones con Anses) y con tal propósito implementó un potente curso de capacitación de sus cuadros técnicos y la planificación de tareas sobre áreas sensibles.(¿Sensibles como Anses?)
Volvemos a las huecas declamaciones pronunciadas en foros internacionales plagadas de buenas intenciones pero totalmente alejadas de la realidad. 
¿Es que alguien puede negar que en lo que en nuestro país respecta, las auditorías realizadas en diversas instituciones y organizaciones gubernamentales carecen de la efectividad y del resultado positivo de transparencia que se busca?
Notamos que se hallaba presente en la inauguración el honesto luchador de la anterior AGN, don Leandro Despouy que es un valorable testigo de las numerosas fallidas auditorías realizadas en Anses y en Arolíneas, todas ordenadamente archivadas por orden de la manda más de turno, la expresidente, doña Cristina Fernández de Kirchner.
En realidad este simposio constituyó una presentación teatral de atiborrados discursos expelidos durante el publicitado desarrollo de las reuniones del G20, presidida por nuestro país.
Nada conocemos sobre una declaracion final del Simposio, ni de los mencionados discursos en él pronunciados.
De todos modos agradecemos que el importante evento nos abra la posibilidad de reiterar nuestras viejas exigencias de que se audite a nuestro
privilegiado organismo Anses, que permanece en la mayor impunidad, dentro del concierto de gran corrupción que se está celebrando en el escenario del gran teatro de los tribunales argentinos.
Fuera del tono burlón con que adornamos este artículo, quisiéramos saber la reacción que se hubiera producido en el seno de los participantes de este serio evento de "auditorías transparentes", si se hubiera traído a colación un caso real expuesto como ejemplo práctico de una obligada auditoría políticamente eludida por los organismos de control del estado. Se trata del otorgamiento de decenas de miles de jubilaciones falsas a extranjeros residentes en los países vecinos, Perú. Paraguay y Bolivia.
Las autoridades de Anses, puestas al descubierto de estas maniobras se limitaron a informar que más o menos 4.000 de estas falsas jubilaciones fueron canceladas, pero no hubo ninguna investigación, ningún sumario, ninguna auditoría sobre un hecho gravísimo de orden institucional que quedó en la noche de la más condenable impunidad.
Como punto final debemos señalar que este es un caso circunstancial, pues existen en Anses miles de estafas, malversaciones, apropiaciones, que hemos denunciado en este espacio desde hace más de seis años, con expreso pedido al Presidente de la Nación, al Jefe de Gabinete y a todos los medios periodísticos de una completa auditoría en todos los niveles, pero en vano.