miércoles, 26 de diciembre de 2018

LA VERDAD SOBRE ANSES

Hace un año y medio publiqué en mi Blogspot “Habla la Experiencia”, lo siguiente que hoy debo reiterar:
“Continúo recibiendo críticas por mis artículos de defensa a los jubilados y por los ataques al organismo previsional Anses. Quizá mis apreciaciones son untanto vehementes, pero nunca ofensivas, ni agraviantes y menos aún faltas a la verdad. Es posible que sean interpretadas como una oposición al gobierno, pero es harto conocido mi enjuiciamiento constante a dicho organismo, desde el anterior gobierno. No hay motivos ni intereses políticos en las opiniones que me merece la actitud siempre negativa y a veces insultante de Anses, que entiendo muy contraria a la misión asignada a sus funciones.”
Hoy, 27 de diciembre de 2018 siguen las críticas a mi reciente publicación referida al zarpazo del gobierno a la caja de Anses por una cantidad apreciable de 86 mil millones de pesos destinados como ya es costumbre a tapar los agujeros fiscales de la administración nacional. 

Es importante señalar que el año pasadp en diciembre se produjo un zarpazo similar acompañado, a las pocas horas, sin esperar la cicatrización, de un préstamo por el mismo valor.
La verdad que es ímproba la tarea que llevo destinada a rebatirlas, por lo que he decidido transcribir un inteligente estudio del prestigioso economista Rodolfo C, Rossi, donde encuentro que sus opiniones son un digno corolario al trabajo queme he impuesto  desde hace muchos años, por la búsqueda de la verdad y la justicia. Dice Rodolfo Rossi:



La ANSES se ha constituido en los últimos años en el gran financiadora del Tesoro Nacional. Sus superávit presupuestarios y reservas constituidas generalmente para previsión de pagos de compromisos de futuros Jubilados, se utilizan para diversos propósitos (Inversiones en proyectos de Obras Públicas: Finalización Central Atómica Atucha II; Financiación de Enarsa para la construcción de las Centrales Eléctricas en Sauce Viejo, Ensenada; Campana; Financiación construcción de Viviendas en diversas Provincias; Financiación al BHN por el Plan de Financiamiento de la Vivienda; Pavimentación 23.000 cuadras en Pcia. de Bs. Aires; Asignación Universal por Hijo; asistencias sociales varias) pero, también, para disminuir parcialmente el déficit fiscal nacional. Adicionalmente tiene inversiones en acciones, créditos productivos e infraestructura y plazos fijos en el sistema financiero nacional.
La crítica a la utilización discrecional de fondos genuinos de los Jubilados, en ocasiones, es eludida con la comparación del anterior sistema de capitalización jubilatoria, que rigió hasta Noviembre del 2008. Bajo tal sistema, también existía un financiamiento fiscal, a través de la adquisición de Títulos Públicos. 

Sin embargo, originalmente, distinto era tal financiamiento, en su relación al vigente en la actualidad. En efecto. Por el anterior sistema, en su inicio y por varios años, se establecía que hasta el 50 % del monto disponible para inversión, podía disponerse para la compra de Títulos y Bonos Públicos, debiendo destinarse el excedente a la compra de instrumentos de capitalización del sistema productivo, preservando fundamentalmente, el ahorro y el valor patrimonial de los beneficiarios del sistema, o sea de los futuros jubilados. Posteriormente, la voracidad fiscal superó tal límite a la inversión pública.
En la actualidad, queda a la instancia del Funcionario la utilización de tal valor patrimonial previsional. 
La transferencia de un sistema del Fondo de Jubilaciones y Pensiones (capitalización) al Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA) (Régimen Público Solidario y de Reparto), determinó la transferencia de una Caja a Diciembre de 2008, de $98.038 millones, que en definitiva, constituía el ahorro de los futuros jubilados, que por aportes y retenciones sobre su ingreso, se había acumulado en casi 14 años, de la vigencia del sistema de capitalización.

Tal importante monto quedó en manos del Fondo de Garantía y Sustentabilidad del ANSES, para su uso, como se ha visto, discrecional.
Nada quedó para los verdaderos titulares de tal patrimonio, cuyos niveles de ingreso jubilatorio son magros, generalmente, por iniciales erróneas liquidaciones realizadas por la Institución que los cobija, efectuadas al momento de sus respectiva jubilación, no respetándose, incluso, las Sentencias Judiciales de Ajuste (Caso: Badaro, Bruzzo, Elliff y otros), ni tampoco la igualdad en los porcentajes de aumento de aquellos jubilados, que durante casi cinco años (2002 a 2006), no recibieron ajuste o aumento alguno, en su haber jubilatorio, por superar el mismo, el mínimo jubilatorio establecido. 
Hoy en día, los juicios previsionales frente a abrumados Juzgados del Sistema de Seguridad Social -consecuencia de tales irregularidades-, en muchos casos, con sentencia firme favorable, superan los 400.000 casos. 
En definitiva, la ANSES se ha constituido en una adicional Agencia del Sector Público Nacional, que sirve a los fines recaudatorios fiscales, posponiendo el interés de sus titulares, los jubilados, que asisten con estupor, a las continuadas transferencias de sus fondos propios, a un Tesoro Nacional deficitario.