Estas son los cinco puntos principales por los que no estamos en
condiciones de festejar el Día Internacional del Jubilado.
-
Han sido tratados como descartados en todos los niveles
y estratos de la sociedad. Gobierno, iglesia, periodismo y organizaciones
humanitarias. Una realidad innegable.
-
El cálculo de sus haberes jubilatorios fue tramposo
desde tiempos legendarios. Esta condenable acción fue realizada ex profeso y en
forma sistemática, lo que dio origen a los cuantiosos juicios previsionales que
las víctimas debieron iniciar.
-
La mala fe continuó su curso, pues conocedor el Estado
de que la razón jurídica era de los litigantes , decidió recurrir a continuas
apelaciones, que naturalmente siempre
perdían y a obstaculizar con chicanas y demoras la normal tramitación de los
juicios.
-
La evidencia de la mala fe fue tan evidente que la OEA
intervino para evitar las apelaciones pues estaban fuera de lugar, eran superfluas y
por lo tanto, siempre se perdían. Hubo entonces un compromiso del gobierno para
no apelar, que nunca se cumplió.
-
Los juicios ganados con sentencias firmes que
ordenaban el pago del reajuste y su retroactividad, no fueron honrados con una
obstinada e inmoral decisión de no pagar. Resulta increíble que hayan casi
500.000 juicios impagos, ¿Acaso el gobierno es deudor incobrable? Esta situación
que coloca al Estado en infractor, pone en peligro su confiabilidad y da lugar
a la inseguridad jurídica, barrera insalvable para radicación de capitales.
Sugerimos tratar este problema en el II Congreso bienal sobre la Seguridad Jurídica
en nuestro blogspot titulado “Anses y la seguridad jurídica”, pero sin resultado.
-
Con el fin populista de recolección de votos, el
gobierno promulgó la Ley de Reparación Histórica el año pasado, como el panacea
universal para los jubilados. Ya nos hemos ocupado de esta ley en varios artículos,
pues es un mayor obstáculo impuesto a los jubilados y una extorsión para los
litigantes con sentencias pendientes de cobro, pues se les promete pago
inmediato con retención de un 50% de la liquidación. A tal punto llega el
gobierno en su intención de no pagar que ni a los que aceptaron por necesidad
esta quita les paga. Sabemos de casos que se vienen demorando desde febrero de
este año y las quejas van en aumento en forma progresiva.
-
A los recientes jubilados que reclamaron por un
reajuste, pero no hicieron juicio, se les dio un ínfimo aumento, con la
condición de adherir al plan de Reparación Histórica, con el compromiso firmado
de no hacerle juicio al Estado.
-
Recientemente Anses ha lanzado un plan de créditos que
inicialmente era para jubilados y pensionados, pero que se extendió masivamente.
Se trata de Argenta y beneficiará a dos millones más de personas que no aportan
a Anses, es decir se utilizan los fondos de los jubilados, una malversación con
fines proselitistas que hasta ahora ha llegado a más de treinta mil millones de
pesos. El gobierno presta nuestra plata, pero no nos pagas las deudas, no es
solamente malversador a costa de nuestra caja, sino que es infractor al no
cumplir con el pago ordenado judicialmente.
