jueves, 5 de febrero de 2015

Peligroso Avance del Populismo



Las protestas en España durante el año 2011 originaron el movimiento "indignados" que el partido Izquierda Anticapitalista lo articuló esbozando un manifiesto para su lanzamiento como partido político bajo el lema "Podemos". 
Según una de las encuestas más importantes, ya es la segunda fuerza política y con grandes posibilidades de ganar las próximas elecciones. Habíamos advertido en nuestro blog del 23 de enero el auge de este partido populista y decíamos al respecto:
"Es así como en enero del año 2014 nace en España el Partido Podemos con una raigambre de izquierda populista, es decir una cultura política autoritaria que interpreta el acto eleccionario como un permiso ilimitado e indefinido para ejercer el poder de manera arbitraria. Los populistas recurren a la demagogia, el despilfarro, el consumismo y el nacionalismo para conquistar las conciencias, engañar y tentar a la población, destruir la economía privada y generar dependencia hacia el gobierno. Su Secretario General, Pablo Iglesias, en sus declaraciones de adhesión a la política bolivariana instaurada por Chavez y su heredero Maduro, afirma que:
“ No existe un régimen bolivariano, existe un país donde hay elecciones democráticas que se llama Venezuela”, y comparó al expresidente venezolano con Bolívar.
Pablo Iglesias fue y es financiado por la dictadura de Nicolás Maduro a través del Centro de Estudios Políticos y Sociales, al cual le fueron girados por lo menos 3,7 millones de euros en diez años. Además, conduce el programa Fort Apache en un canal online del gobierno iraní. También ha asesorado al gobierno de Ecuador. Es decir, nunca tendrá problemas financieros porque siempre encontrará alguna dictadura populista presta a darle una mano. Mientras tanto engaña al pueblo con comunicados que hablan de dignidad y soliviantan a sus seguidores, ya 200.000.”
Se ha diseminado en toda Europa una fiebre demagógica y populista, un cierto esnobismo y una evidente hipocresía intelectual, que la está hundiendo en un abismo peligroso. Hay coletazos que fueron llegando casi inadvertidamente desde la América Latina. Su fase inicial fue la Cuba castrista. a lo  que se puede añadir el guevarismo criminal y terrorista. Prosiguió luego con el dictador Chávez, a quién lo continuó Maduro en la Venezuela comunista financiadora del régimen cubano y gestora de la unión de las repúblicas bolivarianas finalizando con la alianza Cuba, Venezuela, Ecuador, Bolivia y Argentina.
El mundo es testigo de momentos difíciles que se viven con temor y con suma intensidad. Un creciente movimiento terrorista amenaza con desvastar a Europa. Comenzó en París, donde tres reaccionarios musulmanes sembraron el terror asesinando a doce inocentes periodistas de un semanario como venganza por las caricatutas en él publicadas.
Antes de este luctuoso suceso habíamos señalado la incipiente decadencia del mundo occidental al ir abandonando la defensa de sus creencias y tradiciones permitiendo el sordo avance de un populismo venal con políticas permisivas que favorecían un orden anárquico y disolvente. El artículo se titulaba “La Enfermedad de Occidente"…”
El auge de las doctrinas antidiscriminatorias; del tratamiento igualitario; de los derechos humanos; provocó en los políticos el temor a ser catalogados como reaccionarios si no adherían públicamente a esos principios. Los movimientos populistas llevaron al límite el aprovechamiento electoral que los beneficiaba para la consecución de sus propósitos y dieron nacimiento a la hipocresía, a la falsedad y a los doble discursos. Nadie se atreve  a comprometerse con claras definiciones.
Cuando se recupere el sentido común, se condenen los extremismos y se acuda a las fuentes de la abandonada civilización, quizá podamos contemplar el renacimiento de la cultura europea, a la que el mundo tanto le debe.