lunes, 5 de abril de 2021

NO SOMOS IGUALES ANTE LA LEY

 Las Garantías Constitucionales del proceso penal son otorgadas para que todas las personas sean tratadas de la misma manera y con los mismos principios y reglamentos durante la sustanciación de los juicios, Esto no sucede en la justicia argentina, donde reina la arbitrariedad total.

Son muchos los casos que se ven diariamente, sin que exista el menor empeño en terminar con lo que es ya costumbre en los tribunales.

El ejemplo más concreto lo tenemos en el caso Boudou que siendo condenado en todas las instancias, se encuentra en arresto domiciliario desde abril del año pasado-
El argumento de Boudou para mantener la prisión domiciliaria es es el sostén anímico de sus dos hijos y que está pronto a acceder a la salidas transitorias, en función del tiempo que lleva detenido, tanto en la cárcel como en su casa.

A mediados de febrero pasado, el juez Ricardo Basílico, del Tribunal Oral Federal número 4, concedió el recurso para que la Cámara de Casación revise el fallo que había revocado el arresto domiciliario de Boudou.
El Tribunal se reunió el miércoles 31 de marzo en una audiencia virtual para analizar el caso planteado por Boudou, que buscaba cumplir lo que le falta de la sentencia de cinco años y diez meses de prisión en su domicilio, pero fue postergada para el próximo 14 de abril por lo que, en consecuencia, continuará en prisión domiciliaria.

Otros delincuentes vinculados al poder, procesados y detenidos por gravísimos delitos de corrupción, algunos condenados, como Boudou, también fueron beneficiados con la prisión domiciliaria.

En la audiencia citada, estuvieron los jueces de la Sala IV de Casación Mariano Borinsky, Ángela Ledesma y Javier Carbayo, en tanto que por la Fiscalía estará Javier De Luca, y los abogados de Boudou.

Es necesario destacar el trato preferencial dado a este delincuente que con sus apelaciones dio un movimiento inusual a jueces, fiscales, Cámaras y hasta al Supremo Tribunal de Justicia, con los consiguientes gastos y burocrática como exagerada demora.
Otros delincuentes vinculados al poder, procesados y detenidos por gravísimos delitos de corrupción, algunos condenados, como Boudou, también fueron beneficiados con la prisión domiciliaria.

Como bien dice Solanet, Presidente de la Asociación de Abogados por la Justicia y la Concordia, las discriminaciones, que más adelante explicitaremos, son una clara demostración de que no somos iguales ante la ley.
Veamos el ejemplo del tratamiento desigual del caso Boudou, anteriormente mencionado, con los siguientes:

Los pedidos de detención domiciliaria solicitados por los presos juzgados por "delitos de lesa humanidad" fueron y son negados por estos mismos jueces, de manera sistemática, con escasas excepciones a pesar de ser contemplados por las leyes que los autorizan, en razón de avanzada edad, que es precisamente la de los detenidos, todos mayores de 70, hasta 80 y 90 años.
A varios de estos magistrados se les ha escuchado manifestar que se les debe negar in situ los beneficios de la detención domiciliaria, la prescripción y los beneficios legales del 2x1.
Pero la discriminación más insostenible consiste en que son juzgados con violación de las bases del derecho, principio de legalidad, la cosa juzgada, la aplicación de la ley más benigna, la prescripción por hechos ocurridos hace más de 40 años. Se demolió la justicia en nombre de los llamados "derechos humanos" que se instaló como "Política de Estado" por encima del Derecho.

Como duro remache a las situaciones planteadas, índice elocuente de la idiotización de nuestra sociedad en todos los niveles, hemos recibido la invitación especial al Seminario de UBA a realizarse el mes próximo con el tema "El periodismo argentino en su laberinto", directo ataque al periodismo bajo un manto cultural.

Lo más sorpresivo e insólito, por donde se lo mire, es que el 3 de mayo expondrá el propio Amado Boudou sobre su propio caso, disertando sobre "Casos emblemáticos de noticias falsas y guerra jurídica".
Sin comentario.