El padre del ADN, así denominado y premiado con el Nobel, James Watson, autor de la descripción de su estructura, fue despojado a los 90 años de sus títulos y honores, nada menos que por el Cold Spring Harbor Liberatory (CSHL), laboratorio en el que el genetista trabajó durante cuatro décadas.
En 2007, el laboratorio ya lo había expulsado como rector, luego de que Watson dijera al Sunday Times que era "inherentemente pesimista respecto del prospecto de África" porque"todas nuestras políticas sociales están basadas en el hecho de que su inteligencia es igual a la nuestra, mientras que todas las pruebas dicen que en realidad no es así."
En esa ocasión, dijo también que mientras que él desearía que todas las razas fuesen iguales, las "personas que tienen que lidiar con empleados negros descubren que esto no es verdad."
Watson pidió disculpas luego, en aquella ocasión, pero recientemente aseguró que su forma de ver las cosas no ha cambiado.
"Me gustaría que hubiese cambiado, que hubiese nuevo conocimiento que diga que la educación es muchos más importante que la naturaleza. Pero no lo he visto. Y hay una diferencia en el promedio entre negros y blancos en los exámenes de cociente intelectual. Yo diría que la diferencia es genética."
Watson agrega que no lo complace en absoluto "la diferencia entre blancos y negros" y desearía que no existiese. "Es horrible, al igual que es horrible la esquizofrenia", dijo.
El Dr. Francis Collins, director de los Institutos Nacionales de Salud, dijo que la mayoría de los expertos en inteligencia "consideran que cualquier diferencia en el cociente intelectual entre blancos y negros surge ante todo de diferencias del entorno, y no genéticas." , lo que es un reconocimiento de que existen diferencias que no serán genéticas, aunque surjan del entorno.
Los últimos comentarios de Watson fueron hechos en junio del año pasado. En octubre, Watson fue hospitalizado tras un accidente de auto y está bajo cuidados médicos desde entonces, por lo que no pudo responder tras el despojo de sus honores y títulos.
Es mi humilde opinión que en los últimos años el concepto de discriminación, como el de derechos humanos, ha entrado en una etapa de franca ideología que obnubila el normal razonamiento de las personas y llega a extremos no deseados. Ésta es una de las consecuencias que trae aparejada este fenómeno que se viene incrementando en el mundo llamado globalizado y se ha extendido a la política internacional en prolongadas y nunca bien fundadas polémicas con respecto a la migración y a la cultura de diferentes razas y civilizaciones.
Europa es víctima actualmente de una evidente desintegración movida por estos extremos.
Puede rebatirse científicamente la apreciación de un investigador sobre una práctica que podrá ser irrefutable como errónea, pero nunca apelando a doctrinas o ideologías que generen una falsa conciencia sobre los resultados de dicha investigación y lleguen al extremo de un castigo, como en el caso que nos ocupa.
Imaginemos una situación análoga a la que estamos dilucidando. Se le presenta a un investigador genético dos muestras de AGN sin darle a conocer su origen, El científico procede a su estudio y las compara distinguiendo, diferenciando, separando, seleccionando, discerniendo,distinguiendo, vale decir discriminando y llega a conclusiones sobre ambas que son por supuesto diferentes y que se publican con la individualización de los donantes, uno de raza amarilla, el otro de raza blanca.
Naturalmente que los resultados diferentes benefician o perjudican a cada uno de ellos que el genético no conocía.
¿Se le puede acusar de discriminar una raza, criticar su diagnóstico, privarlo de su título y condenarlo con un castigo?