En dos artículos anteriores, bajo el mismo título, manifestábamos nuestra inquietud con respecto a la indiferencia del gobierno y del periodismo por un tema de suma importancia como el de la Anses, y nuestros comentarios eran los siguientes:
“Se destaca la labor
de todos los periodistas políticos argentinos, en cualquier medio radial y
televisivo por las inteligentes preguntas que les dirigen a los miembros del
nuevo gabinete. Ninguno se olvida desde el cepo del dolar hasta el precio del
combustible, pasando por los caminos tortuosos de los motochorros y los
servicios cloacales, pero absolutamente ninguno se le ocurrió preguntar, aunque
sea al voleo, las medidas a tomar con el organismo más cruel y corrupto de la gestión
kirchnerista, la Ansés que viene mutilando los derechos de millones de
jubilados.”
Al conocer las declaraciones del nuevo ministro de trabajo, renació la
esperanza y dijimos:
"Ayer bajo este título hablábamos de los periodistas y políticos del nuevo gobierno, desatendidos de los problemas de Anses. Hoy nos enteramos de que ¡por fin! se produce la primera reacción del nuevo gobierno, ante las declaraciones del recientemente designado Ministro de Trabajo, Jorge Triaca. Ésta es la noticia:
"El Poder Ejecutivo dispuso el cese de la detracción del 15% de la masa de impuestos coparticipables a la totalidad de las jurisdicciones provinciales, decisión que el futuro ministro de Trabajo del nuevo gobierno calificó como "un fuerte golpe a la Anses", organismo que era beneficiado por esos fondos.
"El Poder Ejecutivo dispuso el cese de la detracción del 15% de la masa de impuestos coparticipables a la totalidad de las jurisdicciones provinciales, decisión que el futuro ministro de Trabajo del nuevo gobierno calificó como "un fuerte golpe a la Anses", organismo que era beneficiado por esos fondos.
Hoy tuvimos otro desencanto.
En el programa Código Político fue entrevistado por los dos periodistas del canal TN, el nuevo ministro de Trabajo, Jorge Triaca, una buena ocasión para conocer sus opiniones sobre el problema de Anses, bajo su jurisdicción, y al frente de la cual fue nombrado en el día de la fecha Emilio Basavilbaso.
Sus declaraciones en torno a la política del gobierno con referencia a las relaciones sindicales y empresariales,el desarrollo de las paritarias, el desempleo, la inflación y otros aspectos económicos de su cartera, fueron convincentes denotando un excelente grado de equilibrio y sensatez.
Sin embargo, en ningún momento salió a relucir el tema de un organismo de suma importancia nacional como Anses, que con la Caja más grande del país atiende el pago mensual de más de 17 millones de personas y que tiene a su cargo casi medio millón de juicios de jubilados, obstaculizados y apelados sin causa y que está pasando por un momento muy difícil por el descomunal saqueo oficial.
Que se entienda bien, no se pretende una rápida solución por el equipo del nuevo gobierno, que llega para hacerse cargo de un país destruido económicamente y moralmente por un gobierno corrupto y vengativo que no admite su derrota y continúa decretando leyes de urgencia, diariamente, para dejar tierra arrasada.
Hecha esta necesaria aclaración, queremos señalar que, como siempre la preocupación por los gremios es prioridad ya que se manejan con huelgas, paros y presiones callejeras, mientras la legión de más de seis millones de jubilados, no molestan por su indefensa y precaria naturaleza. Pero cuidado, ellos votan así lo han hecho el 22 de noviembre y puede asegurarse que una gran parte de los votos esperanzados de los mismos, fue de gran ayuda para el triunfo de Cambiemos. Y seguirán votando.