lunes, 2 de enero de 2017

DEL FUEGO A LAS BRASAS


El 2 de enero de 2016 decíamos que el secretario de Derechos Humanos del nuevo gobierno, Claudio Avruj, afirmó que los juicios llamados de lesa humanidad debían proseguir, sin aclarar si en los mismos términos y procedimientos ilegales impuestos por la venganza terrorista del kirchnerismo o si se llevarían a cabo con todas las garantías  de la Constitución Nacional, el Derecho Penal y las leyes vigentes en la materia. Le recordábamos  la frase del jurista austríaco Hans Kelsen “Cuando los vencedores juzgan a los vencidos amañando y falseando los procedimientos judiciales para que conduzcan a una segura condena, entonces es cuando la justicia se convierte en venganza.”
Agregaba, “confío en este gobierno al que le he dado mi voto para que lleve a nuestro país a buen puerto y que cumpla con lo prometido en la campaña preelectoral.
”Hoy se cumple exactamente un año de aquella publicación y el balance de esas promesas  es totalmente negativo.
Continúa el teatro de los juicios y se incrementan las acusaciones en forma indiscriminada sobre falsos testimonios preparados en las oficinas del mismo gobierno. Lo que está sucediendo es insólito e inexplicable ya que  los jueces de las Cámaras son terroristas derrotados por aquéllos a  los que ahora están juzgando.
Esto es oficial pues fueron recusados e inhabilitados, a pesar de lo cual siguen las mega-causas con magistrados montoneros.
Los ataques de organizaciones izquierdistas internacionales, son instigados por El CELS y Amnesty International, como lo comprueba la campaña orquestada por el caso de Milagro Sala.
Como siempre, sus servicios de inteligencia bien actualizados conocen fecha y hora de las visita de mandatarios extranjeros a nuestro país para hacerles llega cartas de la defensa de los derechos humanos, es decir de los terroristas que, invariablente , son puestas en manos del Presidente.
El tratamiento inhumano de los presos políticos, ancianos en su gran mayoría, empeora cada día y ya han muerto en cautiverio 389,de los cuales 48 desde el 10 de diciembre de 2015. La negativa a otorgar prisión domiciliaria , que la ley concede, es arbitraria y vengativa. Inclusive a los que fueron  beneficiados por la misma, se los ha devuelto a las prisiones de origen por disposición de fiscales intervinientes en los juicios, revocando las sentencias.
Se vienen negando sistemáticamente informaciones requeridas por periodistas, abogados y ciudadanos  sobre la nómina y las indemnizaciones pagadas a terroristas montoneros, en franca contravención a las normas dictadas con respecto a la transparencia de los actos de gobierno, y esto se refleja en la cantidad de críticas publicadas en las redes sociales y en cartas de lectores, además del pedido de intervención al señorPresidente que le formuláramos en este blogspot del 29 de diciembre
Como presente del nuevo año entrante se produce una masiva detención y citación a declaración indagatoria de 74 ex miembros del Ejército y de la Policía por delitos de lesa humanidad  cometidos hace más de 40 años. Se trata de la unificación de causas que se tramitaban por separado y por importantes datos  presentados al Poder Judicial por un (1) testigo en el año 2009. (sic)
Se les enrostra haber tomado parte, a sabiendas, de una macro-organización delictiva montada sobre el aparato estatal para ejecutar un plan represivo con diferentes niveles de ilegalidad. Para ponerlo en claro, la disposición emanada del Poder Ejecutivo de un gobierno constitucional, para combatir la subversión , ha pasado a constituir una macro-organización delictiva montada sobre el aparato estatal.
En buen romance, equivale a decir que los magistrados especialmente designados por el kirchnerismo para efectivizar la venganza sobre las fuerzas armadas vencedoras del terrorismo, habrían pasado a  conformar un comité de juristas, que luego  sería el partido político llamado Justicia Legítima, comité que redactó encubiertas  disposiciones ilegales ordenadas por los Kirchner para que fueran accesibles a los propósitos de poder fijar sentencias de condenas a prisión perpetua a todos los uniformados acusados  por hechos delictivos de lesa humanidad cometidos hace más de 40 años.
La desorientación, la pasividad o la complicidad del gobierno con los organismos izquierdistas, sean estos intelectuales, sindicalistas, revolucionarios, comunistas, o provenientes de barrios marginales, está provocando un malestar ciudadano de graves consecuencias que ya es un clamor popular  en progresivo aumento.
Basta señor Presidente, ya es hora de que cumpla con el compromiso adquirido de dar fin al “curro” de los Derechos Humanos, según sus propias palabras. No le debe temblar la mano para ejercer el poder que emana de sus atribuciones y que el pueblo le ha conferido. Para eso se lo ha votado.