Amigos míos, en la Justicia Previsional tengo un
juicio por reajuste de haberes con sentencia favorable de la Corte Suprema de
Justicia con fecha 15 de Julio de 1997 que el organismo Anses no se digna
pagar. Como he recibido muchas adhesiones y sugerencias, me he detenido en
reparar en una de ellas que me parece interesante. Se trata de intentar una
aplicación al famoso Guinness World Record, al cual se me dice que soy
merecedor, dadas la particular y el diferente motivo que muestra las
características del caso.
He tomado la decisión de llevarlo a cabo, más que
todo como una distracción humorística y con la intención de que su divulgación
periodística y en las redes sociales sea una causa de fastidio y preocupación
para dicha institución.
Habrán advertido que mi propósito no es acceder
al premio, lo que considero muy difícil, sino provocar un revuelo para hacer
pública la conducta negativa y a todas luces injusta e ilegal del organismo que
me viene negando sistemáticamente el cumplimiento de una orden judicial del máximo
tribunal de justicia.
Para que se tenga idea de
la pertinacia en la negativa de Anses, señalamos que en la última intimación
que le hace el Juzgado para que pague la sentencia, el 15 de Mayo de 2017, en
los términos empleados se advierte un reto bien claro al tozudo organismo, pues
entre otros considerandos, manifiesta: “El organismo se limitó a efectuar meras
manifestaciones sin fundar la razón de sus dichos, por lo que corresponde sin
más desestimar tales cuestionamientos. Cabe recordar que la impugnación de la
liquidación en forma genérica, sin especificación de lo que se considera
desacertado, ni en el aspecto aritmético, ni en lo atinente a las demás
cuestiones fácticas y jurídicas, es desestimable.”
Con todos estos retos y
los chas chas en la cola, Anses no cumple.
El objetivo que ahora
persigo, alejado de un drama sin remedio, es el de tener una diversión a los 94
años ya que todavía conservo una de las pocas virtudes que adornan mi
existencia, que es el sentido del humor.
El primer acto de la
comedia a que me he dedicado es la publicación de mi carta, hoy 1/7/2017, en los diarios
Clarín de Buenos Aires y La Capital de Rosario, que abajo reproduzco.
Señor Director:
Me jubilé el 31 de
Octubre de 1989.
El 4 de Agosto de 1992
efectué un reclamo administrativo ante ANSES por mala liquidación de mis
haberes, Expediente Número 997-51686761-001 que fue rechazado por el organismo.
Apelé ante la Cámara
Nacional de Apelaciones de la Seguridad Social, Expediente Número 21054/93.
Obtuve primera sentencia
favorable de la Cámara el 20/9/93 sentencia 41470. Pero Anses apeló ante la
Corte Suprema de Justicia de la Nación, la cual falló a mi favor mediante
sentencia del 15 de Julio de 1997.
Anses ajustó mi
jubilación, pero eróneamente y en una medida mucho menor de lo que
correspondía de acuerdo a la sentencia.
Durante años fue
rechazando sistemáticamente las liquidaciones presentadas para el pago ordenado
judicialmente. Es decir, estoy a 20 años de la sentencia, tengo 94 años y sigo
esperando. Como todavía conservo el sentido del humor, le comunico que estoy
tramitando en Londres el Guinness World Record. Lo saludo atentamente,
Silvio Pizarro
DNI 1.738.044
Me embarqué en el Titanic
para romper el témpano (Anses) y necesito la ayuda de mis amigos. Hagan olas y
que el mundo se entere que en este extremo sur llamado Argentina, tenemos el
orgullo de poseer un Papa, Francisco, un astro futbolístico, Lionel Messi y una
institución kafkiana, Anses.